Historia y orígenes del sumiller
El copero ha desarrollado una importante labor a lo largo de la historia y lleva acompañando al hombre prácticamente desde la antigüedad. Esta figura ha ido evolucionando a través de los siglos hasta transformarse en el oficio que hoy todos conocemos como sumiller.
En la D.O. Arlanza conocemos a la perfección la relevancia que tiene el #sumiller o #sommelier, cuya labor es fundamental y cuyo papel es tan importante que cierra el ciclo del #vino para que llegue en las mejores condiciones al cliente, lo cual puede suponer la diferencia entre un servicio de restauración excelente y uno mediocre.
Sus orígenes se remontan a Mesopotamia, Egipto y Grecia como hombres de confianza de reyes y gobernantes. Después, en la Edad Media evoluciona a la figura del escanciador para denominar a las personas encargadas del servicio del vino en los grandes palacios, donde el cargo de copero mayor se desarrolla como uno de los más influyentes.
En esta época existía la figura del somier, que se encargaba del transporte y cuidado de pertenencias, entre las que se encontraba el vino. Hay fuentes que afirman que de este término derivó el cargo de sommelier que se ocupaba de proteger y mantener armas, panadería… hasta que se evolucionó y se encargó de la salvaguarda de las #bodegas.
En la actualidad es el especialista encargado del servicio de vinos y licores en el sector de la restauración y entre sus principales funciones destaca lo siguiente:
- Asesoramiento del cliente en maridaje.
- Instructor de personal del restaurante en nociones básicas sobre el vino.
- Responsable de la creación de la carta de vino del restaurante.
- Administrador del mantenimiento de las bodegas del establecimiento.
- Encargado de la dirección de las catas de vino.